Científicos logran predecir el riesgo de muerte según el porcentaje de grasa corporal

Un reciente estudio evaluó a más de 4.200 personas de entre 20 y 49 años, analizando cómo la proporción de grasa en el cuerpo se relaciona con la probabilidad de fallecer en los siguientes 15 años. La investigación, realizada por la Universidad de Florida, concluyó que el porcentaje de grasa corporal sería un indicador más confiable del riesgo de muerte y enfermedades cardíacas que el tradicional índice de masa corporal (IMC), el cual es ampliamente utilizado en los controles médicos actuales.
La Plata, 14 Jul (Por InfoGEI).-El estudio utilizó una técnica no invasiva llamada impedancia bioeléctrica para medir la grasa corporal de los participantes, y luego comparó estos valores con su evolución en un período de 15 años.
Los resultados mostraron datos preocupantes: quienes presentaban un alto porcentaje de grasa corporal, tenían un 78 % más de riesgo de morir por cualquier causa, y hasta tres veces más probabilidades de fallecer por enfermedades cardiovasculares. En cambio, el IMC no evidenció una relación estadísticamente significativa con el riesgo de muerte, lo que cuestiona su eficacia como herramienta de evaluación de salud.
Según los investigadores, el IMC continúa utilizándose en chequeos médicos como un indicador rápido del estado corporal. Sin embargo, su principal debilidad es que no distingue entre grasa y masa muscular, lo que puede llevar a interpretaciones erróneas.
“Un culturista, por ejemplo, puede tener un IMC alto debido al desarrollo muscular, sin que eso implique un problema de salud”, señaló el investigador Frank Orlando, remarcando que muchas personas saludables son clasificadas como obesas solo por este índice.
Sugerencia de expertos
Frente a estos hallazgos —publicados en la revista Annals of Family Medicine—, los expertos sugieren que reemplazar el IMC por la medición del porcentaje de grasa corporal podría representar un cambio significativo en la evaluación de riesgos para la salud.
Tratamiento recomendado
Además, recomendaron incorporar herramientas como la impedancia bioeléctrica en la práctica clínica, ya que se trata de una tecnología accesible, fácil de aplicar y disponible en el mercado. “Este estudio deja claro que es momento de adoptar una alternativa que ha demostrado ser mucho más precisa”, afirmó el profesor Arch Mainous. (InfoGEI)Ac